¡Hola amigos!

¿Cómo estás?

Espero que te la hayas pasado muy bien en estas vacaciones de diciembre, que hayas comido mucho en navidad y año nuevo y que aún tengas un pequeño huequito porque todavía nos falta el día de reyes para terminar el maratón.

Antes de continuar y contarte tantas cosas déjame darte la bienvenida al 2019, y espero que todos tus deseos, metas y sueños se cumplan, recuerda trabajar día con día por ello, y segundo te pido que te despidas porque este mes Annette Alizée va a cambiar completamente el contenido y el diseño, obviamente poco a poco para ya no estar sin saber de ti tanto tiempo como el año pasado. Se vienen muchas cosas en cuanto a los blogs (tú lo sabes) y ojalá te guste mucho.

Ahora sí, vamos a lo que venimos.

Aproximadamente el 8 de agosto del 2018 comencé a platicar con un compañero de trabajo, primero eran platicas laborales y con el paso de los días me di cuenta que podía hablar de muchas cosas con él, desde el clima hasta de filosofía existencial y se sentía tan bien platicar con él pues siempre había algún tema por hablar y lo mejor de todo no te juzgaba o miraba extraño por todo lo que decías.

Con el paso de los días comenzamos a hacernos muy buenos amigos, hablábamos todos los días por WhatsApp, nos contábamos parte de nuestra vida, y lo que pasaba día a día, comenzó a saber mucho de mí como yo de él y se volvió mi mejor amigo, pero por alguna extraña razón con el paso de los días y estando con él me daba cuenta que es la persona que quería en mi vida siempre, que es alguien tan extraordinario, maravilloso y único, es como si hubieran tomado a la persona ideal para mí y la hubieran puesto en mi vida y cada día que hablábamos y lo veía sonreír me quedaba más que claro.

Un día de la nada en septiembre se me ocurrió decirle que fuéramos a entrenar pero ese "entrenamiento" terminó en desayuno (y gracias a eso tendremos una sección nueva en el blog) y al final fuimos a un pequeño café y de ahí surgió la idea de visitar todos los cafés del centro y sus alrededores para conocer, descubrir y conocernos más entre los dos.

Teníamos tantas platicas de amor, de esas en las que puedes hasta llorar preguntándote que está mal de ti, porque nada de lo que haces funciona y parece no existir la persona ideal en tu vida, esas platicas donde te das cuenta que una persona es un mundo diferente pero que te gustaría compartir tu mundo con él, eso me pasaba cada que hablábamos, cada que lo veía; y me daba tanto miedo decirle todo lo que sentía por él pues pensaba que su respuesta no sería la misma o incluso arruinaría la amistad tan genial que teníamos.

Después de tanto pensar, de tanto imaginar que pasaría en ambas respuestas, un domingo decidí que era tiempo de decirle porque si no lo hacía no podría estar en paz conmigo y sería más triste estar con él, salir, verlo reír, sin poder hacer algo. En la salida del trabajo estuvimos platicando y con toda la pena pero la felicidad del mundo comencé a decirle todo lo que sentía, dijera lo que dijera estaría feliz pero jamás creí que escucharía lo que tanto quería, el saber que el sentimiento era recíproco te juro que cambió todo en mi vida y no estoy exagerando.

Un sábado que los dos salimos a la misma hora decidimos ir a ver una película pero en lo que comenzaba nos fuimos a caminar mientras platicábamos de más cosas (para este punto ya éramos más que amigos pero aún no éramos novios) jamás olvidaré ese momento en el que el cielo era color azul marino y la luna un bello cuarto menguante, el estaba frente a mi viéndome a los ojos y me preguntó de la nada que si quería ser su novia... Quería llorar para ser sincera, jamás me había sentido tan feliz en mi vida por tener a alguien, y es sentir que es la persona que esperaste por mucho tiempo pues puedes ser tú, sin problemas, sin preocuparte de que dirá o que pensará, así es mi vida estando con él, desde ese sábado 17 de noviembre.

A lo largo de este pequeño mes con él me han pasado cosas tan pero tan
extraordinarias; tocamos pequeñas ardillas un da que fuimos al parque a ver a losa patos, no conseguimos tocar un pato pero logramos que muchas ardillas se acercarán a nosotros, les dimos comida y nos tomamos una foto con las ardillas.

También fuimos a la posada del trabajo y se sintió tan bien poder ir a lado de la persona que más quieres y déjame decirte que se ve muy pero muy bien de traje.

Tuvimos el día más pesado de diciembre en el trabajo y aunque casi no nos hablamos
en ese día, valió la pena al final, créemelo, totalmente, porque además de cenar con mis compañeros después de ahí fuimos los dos disfrutando del frío de la noche mientras platicábamos, para mí fui pasar Navidad a su lado aunque solo haya sido un pequeño momento.

Planeé con tres semanas de anticipación su regalo de navidad, soy de las personas que le encanta regalar cosas pero esta vez me esforcé demasiado por poder tener el regalo a tiempo (no tengo foto del regalo) creo ir acerté en lo que le hice.

Ángel es una persona que cambió mi vida por completo, me impulsa a ser mejor cada día, me apoya en todas mis cosas, siempre me cuida, me hace reír, se preocupa por como estoy, le gusta conocer lo que hago y bueno el literalmente es el ángel que llegó para mejorar todo en mi, y si lees esto quiero que sepas que eres loas bonito que tengo en mi vida, que cada día contigo siempre es como el primero y que siempre le gritarle al mundo cuánto te quiero.

Y bueno todos los días siempre hay detalles, en verdad, desde un pequeño chocolate

Pero yo ya te platiqué mucho de él ahora quiero que tú me platiques un poco de tu Razón, si tienes a esa personita que sientes que fue puesto en tu camino especialmente para ti. Me gustaría saber un poquito de su historia.

Te deseo un excelente inicio de año, y que tus días estén llenos de amor y felicidad.

Bye.